Solía luchar con el cromatismo en mis solos. No quería nada más que lograr ese sonido bebop, entrando y saliendo de los cambios de acordes sin esfuerzo y sin repetirme nunca. No fue hasta que me senté conscientemente y se me ocurrieron algunos ejercicios dirigidos específicamente a este concepto que comenzó a surgir en mi forma de tocar.
Tiendo a pensar más verticalmente cuando improviso. Siempre me ha atraído más la visualización de acordes que de escalas. Entonces, cuando se me ocurrieron estos ejercicios, traté de aprovechar mis puntos fuertes e incorporarlos a mi trabajo sobre estructuras de acordes diatónicos.
Si no ha trabajado en tríadas diatónicas y acordes de séptima, ese sería un buen lugar para comenzar. Muchos de ustedes, sin duda, ya han trabajado en este concepto. Comience con sus tríadas diatónicas tocadas en tresillos a un tempo lento para que sus dedos y su cerebro se acostumbren a cómo se sienten. He escrito el ejercicio en la clave de C para usted como el primer ejercicio en el PDF adjunto. Sin embargo, asegúrese de poner el ejercicio en las 12 teclas. Esto es difícil pero absolutamente necesario.
Después de tener estas tríadas en su haber, vamos a agregar un tono de enfoque cromático a cada tríada. Ahora nuestro tresillo se convierte en un grupo de cuatro corcheas y nos permite usar tonos de acercamiento cromático para agregar más interés a nuestras líneas.
También puede mantener la sensación de tresillo agrupando las notas de una manera ligeramente diferente, como verá en el siguiente ejercicio. Mi consejo sería practicar ambos para desarrollar la mayor flexibilidad rítmica posible. Recuerde, los buenos solos tienen que ver con el ritmo y todo el conocimiento armónico que tenga en su haber no importa si no puede expresarlo correctamente.
El siguiente conjunto de ejercicios se enfoca en agregar cromatismo a los acordes de séptima diatónica. Nuevamente, comenzamos aprendiendo el patrón básico de los acordes puramente diatónicos. Simplemente estamos tomando el mismo concepto de las tríadas diatónicas y agregando la séptima a cada acorde.
El siguiente ejercicio agrega el tono de enfoque cromático inferior al igual que en el entrenamiento de tríada, pero ahora tenemos una frase de cinco notas que necesita un enfoque rítmico más creativo. El primer ritmo que utilizaremos son dos corcheas seguidas de un tresillo.
El siguiente ejercicio invierte este ritmo, poniendo el tresillo primero y las ocho notas después.
El último ejercicio explora la multitud de enfoques rítmicos que se te pueden ocurrir para hacer que este concepto sea más flexible y útil. En este ejercicio, en cambio, usamos semicorcheas con una notable ausencia de tresillos por completo.
Estos ejercicios lo ayudarán a comenzar a tocar y escuchar el cromatismo inyectado en ejercicios diatónicos. Le sugiero que proponga de 5 a 10 ejercicios más utilizando los mismos conceptos, pero que sean exclusivos de su estilo de interpretación y su forma de pensar sobre la improvisación. En una publicación futura, llevaré este concepto mucho más lejos a otras notas en los acordes y al pensamiento más complicado. Sin embargo, por ahora, concéntrese en hacer estos ejercicios en las 12 teclas y en varios tempos.
¡Buena suerte, empieza despacio y diviértete!